Excluyen empresarios de Teziutlán a discapacitados para plazas laborales

Teziutlán, Pue.- Al concluir la semana de la discapacidad, reconocen que empresarios no están abiertos para dar empleo a jóvenes que la padecen aunque ya hayan sido capacitados, entre los factores que intervienen son la insensibilidad y la ignorancia, lamentó el Centro de Atención Múltiple Especial (CAME).

Atiende Educación Especial a 250 alumnos discapacitados en CuetzalanEntregan credenciales del DIF Nacional a niños con discapacidadEn este tema, el docente de talleres, Francisco Hernández Román, mencionó que es muy importante que los jóvenes con discapacidad pueden integrarse a la vida social y laboral, pero desafortunadamente a los empresarios aún les falta sensibilidad para aceptar personas que las padecen.

Otro de los problemas es que la sociedad también los limita y lo peor es que en pleno siglo XXI, aún hay familias que los esconde y los tiene marginados.

"Posiblemente sea falta de conocimiento de los empresarios, muchas veces no voltean a ver a las personas que tienen alguna discapacidad porque a lo mejor piensan que su rendimiento no va a hacer el mismo", dijo en entrevista.

Con el objetivo de concientizar y eliminar la discriminación hacia las personas con algún tipo de discapacidad, el CAME realizó un desfile y ofreció productos elaborados por las más de 70 niñas, niños y jóvenes que son capacitados en sus talleres.

En el CAME se da instrucción desde preescolar hasta jóvenes de 22 años que padecen alguna discapacidad y en donde se imparte capacitación laboral en las ramas de: preparación y conservación de alimentos, siembra de hortalizas, jardinería y panadería.

Ahí se atienden a niños y jóvenes que padecen de discapacidad intelectual, síndrome de down, autismo, sordomudos, débiles visuales, entre algunas.

Al respecto, el docente de talleres, Carlos Luna, también resaltó la importancia que las empresas se sensibilicen que en el CAME preparan a jóvenes con discapacidad, aptos para que se integren a la vida productiva para que puedan salir adelante, "desgraciadamente la sociedad no está enterada que dentro de sus discapacidades pueden realizar ciertas actividades".

Un inspirador talento

Sebastián tiene 18 años y padece de discapacidad intelectual, pero eso no es motivo para que no aprenda e intente así ser independiente y productivo pues es un gran dibujante, una habilidad que la aprovecha para el pirograbado en madera, piel y corcho, el reto es que logren vender estas artesanías cuyos precios son desde 20 pesos.

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